El ácido acetil salicílico es un antiinflamatorio no esteroideo que presenta propiedades analgésicas, antipiréticas, antiagregante plaquetario y antiinflamatorias, que generalmente se utiliza para aliviar dolores leves y moderados, en procesos inflamatorios como artritis y en procesos gripales.
En pediatría se puede utilizar vía oral en 1*:
- Tratamiento o alivio sintomático del dolor ocasional leve o moderado en > 16 años.
- Tratamiento de la fiebre en >16 años.
- Antiagregante plaquetario: profilaxis de infarto agudo de miocardio (IAM) o reinfarto en pacientes con angina de pecho inestable o IAM, tromboflebitis, flebotrombosis y trombosis arteriales, tromboembolismo postoperatorio en pacientes con prótesis valvulares biológicas o con shunts arteriovenosos. Prevención de accidente cerebrovascular en >16 años.
- Inflamación no reumática: dolor musculoesquelético, lesiones deportivas, bursitis, capsulitis, tendinitis, tenosinovitis aguda (E: off-label).
- Artritis reumatoide, artritis idiopática juvenil, osteoartritis, fiebre reumática (E: off-label).
- Enfermedad de Kawasaki (E: off-label).
A la hora de elaborar un jarabe con este producto, debemos tener en cuenta que el ácido acetilsalicílico en solución acuosa hidroliza rápidamente, de manera que debemos evitar los excipientes hidratados.
Un ejemplo de excipiente a usar en esta situación sería el vehículo oral anhidro de la USP, que se elaboraría con sacarina 0,1% (como edulcorante), BHT 0,1% (para evitar el enranciamiento del aceite) y aceite de almendras en cantidad suficiente para el volumen necesario. En caso de ser necesario, también podría añadirse una esencia, que hiciera más palatable esta composición.
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1* AEPED.